Ultimo sábado.

Noche de luna llena. Qué irónico, la ultima del año. Me pregunto cuál fue la necesidad que tuviste de haber hecho tal cosa si yo no te hice nada. Me encantaría vagar por tu mente un rato para saber que pasa por tu cabeza. Quisiera robarte un poco de verdad, solo un poco. Tengo mil y un insultos dándome vueltas por la cabeza todos dedicados a vos. Hora de lavar el odio y seguir un poco con la hipocresía que suelo llamar "el día a día".

Aufwiedersehen

Buenas noches

Cansado de la realidad, me escondí en mis pensamientos. La mentira duele, pero la verdad más. Esos días que pasamos creo que fueron una mentira que me gustó y hasta quizás quisiera poder volverlos a vivir.  Hoy estoy acá  reflexionando que hacer. Que bien me haría un cigarrillo en este momento.. ¿Para que mentir? Lo que me haría bien en este momento sos vos. Masoquista de mierda. Afuera, un frío despiadado azota la ciudad, adentro no es muy distinto. Tratando de olvidarte, queriendo que nunca hayas existido, estoy acá.. sentado, mintiéndome descaradamente, carcomiendome el alma. Le tome el gusto al veneno. Sus labios eran mi droga y ahora estoy en una insoportable abstinencia que me mata por dentro.. -----

Mordiendo el aire

  Ansiosas melodías tarareaba mientras caminaba por esa calle apenas iluminada por unos cuantos postes. Una sonrisa de oreja a oreja recorría su rostro. ¿Habría algún motivo? Yo no lo se. La gente no debería necesitar algún motivo para sonreír, deberían hacerlo y ya. Dicen que es sano, quien sabe.. Cabizbajo, prendió un cigarro buscando oxigeno en el humo. Quizás el peor lugar para hacerlo pero el mejor para él. Siguió su camino.. su sonrisa aún se mantenía. Se puso a recordar viejos momentos.. la nostalgia lo invadió. pero la sonrisa seguía ahí.. intacta. "Como me gustaría poder frenar el tiempo en el preciso instante que me hizo feliz" pensó. El tarareo se convirtió en un silbido, los pensamientos revoloteaban por su cabeza. Las calles se tornaban más y más oscuras a cada paso. No lo percibió. Soñaba con ver el día. la oscuridad lo absorbía lentamente, la culpa lo mataba. En su mirada llevaba el dolor, mil pesares sobre sus hombro. Hombre que aparentaba ser fuerte pero solo era eso, una apariencia. Ni una sola estrella en el cielo. Soltó un drogadicto alarido lleno de tristeza, bronca.. amargura. En un agonizante silencio las lágrimas brotaron. La soledad lo abrazó y carcomió su alma. Los recuerdos del pasado eran como puñales en el corazón. Lo único que lo aferraba a su vida se había ido y él seguía ahí.. lamentándose.  No aprovechó el tiempo que la tuvo junto a él, el tiempo le jugó una mala pasada..

Figuras.

  No se oía mas que el vacío de esas viejas calles donde el viento azotaba con recelo las ventanas de los edificios. Allí, a escasos metros reposado en una zanja, se vislumbraba un cuerpo. Un hombre adulto al parecer. Me acerqué lentamente con cierta cautela para ver si aquella persona se encontraba bien. Cuando me encontré a su lado, repentinamente, un alarido desgarra el silencio. Un grito de mujer. Me desperté sobresaltado, solo fue un mal sueño.
  Eran las 5.a.m del lunes según mi alarma. Tome del vaso de agua que estaba junto a mi, lo lleve a mi boca, tenia la garganta en extremo seca, me asfixiaba. La sensación de alivio después del primer sorbo fue exquisita. Me abalance al baño con rapidez, necesitaba mojarme la cara. <Ese sueño.. fue muy real> Me dije a mí mismo. Me miré al espejo y ni bien hice contacto con mis ojos en el reflejo, me desmayé.
  Abrí los ojos lentamente, mis párpado pesaban, pero logre divisar a mi hermana, en realidad,  era mi media hermana por parte de mi padre, su madre había muerto hacia ya 5 años en un accidente y desde entonces vive con nosotros. Desperté, y la vi a mi lado. Me observaba. Me preguntó si me encontraba bien, se veía preocupada pero a la vez tranquila, solía ser así, para tener tan corta edad parecía toda una adulta. No logré pronunciar palabra. Estaba algo mareado por la contusión pero logré asentir. Me reincorporé, le agradecí su preocupación y le pedí si me podía dejar solo. Reitero su pregunta, y nuevamente asentí. Cuando finalmente salió de la habitación decidí ducharme. No podía apartar mis pensamientos de aquella pesadilla. "¿Qué significaba?"
  Bajé las escaleras y me encontré a mi padre. Estaba preparando el desayuno para mi hermana y para mi. Le saludé, y como todas las mañanas, mantuvimos una pequeña charla, lo cotidiano: las noticias del día, la inseguridad, deportes y mientras tanto desayunábamos.  Al levantar la vista para ver el reloj antiguo que se encontraba en la pared, me dí cuenta que ya era tarde, debía partir hacia la escuela. Tomé el celular, los auriculares, la bicicleta que estaba apoyada en la pared de la cocina, saludé a mi hermana y a mi padre y me fui rápidamente.
  La mañana de hoy la ciudad estaba nublada y fría como nunca. La autopista, como todas las mañanas, estaba abarrotada de autos, bocinas e insultos de personas apresuradas por llegar al trabajo.
 Me encontraba hundido en mis pensamientos, tanto así, que en la trayectoria casi me atropella un auto, vaya susto. No me podía sacar de la cabeza ese sueño. Estaba seguro que significaba algo pero no podía descifrar qué.

Por terminar.